SALVEMOS EUROVISION

¡PUES NO! que no se salve.

Ya lo dije en mis anteriores post sobre el tema, para mí, es casposo y antiguo, postguerrico, diría yo.

Daba pena oír a Urribarri acertando de pleno las votaciones de los distintos países participantes, como si fuera un vidente.

Con lo que dada nuestra situación geográfica, me temo que nunca más ganaremos otra edición del dichoso festival.

Si de mí dependiera, España no participaría más. Italia y algún otro país ya lo hicieron. Todos los años el gomazo de Eurovisión me recuerda al gomazo del maldito euro. ¡Vaya castaña!

Eso, o que Zapatero se pasee por Europa comprando los votos, como se ha dicho hizo en su día un gobernante español de nombre impronunciable. Quién sabe, a lo mejor en las siguientes elecciones si la cosa le va mal al gobierno…………………………

En fin, el Chikilicuatre ha estado bien y las bailarinas, buenísimas. ¡Joe con las bailarinas!.

Lo que queda claro es que los europeos son unos sosos de cojones, pero contra eso no se puede luchar.

Ya vale con eso de que “lo importante es participar” cuando está cantado que se vota a vecinos o amigos, sin importar la calidad de la canción. Aunque este año, divertida si pero calidad poca.

Además la majadería del concursito debe costar una pasta, que tal vez, repartida entre los contribuyentes saldríamos a otros 400 € y ya tendríamos 800 todos los años.

¡SALGAMOS DE EUROVISION!

Saludos.